Hernán Vergara nació en Buga, Colombia, en 1910. Es el sexto de los ocho hijos del doctor Felipe Vergara y de doña Mercedes Delgado. En 1939, se hace doctor en Medicina en la Universidad Nacional de Colombia, con la tesis “Estructura de la personalidad”. En adelante, será la psiquiatría la ruta de su ejercicio de la Medicina. En 1941, contrae matrimonio con doña María Carulla. De su matrimonio hubo siete hijos.
Apenas iniciada la universidad, se ve convocado por la fe cristiana. Esa fe se proyectará indeleblemente en su vida e iluminará con la misma intensidad todas las facetas de su rica trayectoria. La fe traza la ruta no sólo del católico militante sino también la del pensador, el maestro y el psiquiatra. Desde esta perspectiva, recorreremos brevemente su itinerario humano.
Hernán Vergara entra a la Acción Católica en 1936, cuando este movimiento se inicia en Colombia y es miembro activo de ella hasta la clausura de sus organizaciones, en 1941. En ese mismo año, es co-fundador de la Orden Tercera Dominicana. En 1946, participa en el Comité de Ayuda a los Inmigrantes, formado a instancias de Pío XII, en favor de los europeos desplazados por la Segunda Guerra Mundial. En 1947, cofundador de la Revista Testimonio, una voz de simples católicos, de la que será director durante los diez años de su publicación. Testimonio recoge, además del pensamiento teológico de la Iglesia universal, la vivencia cristiana del doctor Vergara y del grupo de la Orden Tercera.
El doctor Vergara es co-fundador del Club Serra, para el fomento de las vocaciones sacerdotales y del Seminario de los Santos Apóstoles, para vocaciones tardías (1966). Es promotor en Colombia de los estudios de Antroplogía Bíblica. Organiza seminarios que despiertan entre los católicos el interés por profundizar en la Biblia. Como secuencia de estos seminarios, albergará en su casa por varios años una Tertulia Bíblica que va consolidando un grupo de creyentes que terminará optando por vivir el cristianismo comunitariamente con él. El grupo se consolidó con la fuerza del testimonio en defensa de la vida, alrededor de la Encíclica Humanae Vitae de Pablo VI. Es así como nace la Comunidad Humanae Vitae en 1977. La defensa de la vida es la razón de su fugaz paso por la política (1969-1972). En 1969, el único candidato a la presidencia de Colombia (período 1970-74) que a nombre del cristianismo se compromete en su campaña a rechazar para el país las políticas de control natal, compromete también a Hernán Vergara a acompañarlo desde las directivas del partido Alianza Nacional Popular (ANAPO).
Participa como ponente en varios congresos internacionales de organizaciones católicas como Pax Romana, Acción Católica y de los incipientes partidos Demócratas Cristianos de Latinoamérica.
Hernán Vergara es un maestro nato. Se inicia tempranamente en la actividad docente con Biología. Pronto se concentrará en el campo de la Psicología: en la Facultad de Ciencias de la Educación (1934), en la Facultad de Derecho de la Pontificia Universidad Javeriana (1941). En 1950, es el primer decano de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Colombia. Más tarde tendrá esta cátedra en la Facultad de Derecho de la Universidad Santo Tomás. En 1944, inaugura en la Facultad de Medicina de la Universidad Javeriana, la cátedra de psiquiatría. El ejercicio de la psiquiatría en las distintas instituciones existentes para la enfermedad mental, lo lleva a fundar la Clínica Santo Tomás en 1944. En ella ha de proyectar su búsqueda de hacer de la psiquiatría “una “medicina de la persona”.. Podemos decir que la clínica Santo Tomás es un centro de educación permanente en psiquiatría.
El doctor Vergara es miembro fundador de la Sociedad de Psicopatología, Neurología y Medicina Legal (1944) y presidente de la misma 1959-1960; en 1961, es co-fundador de la Sociedad Colombiana de Psiquiatría.
Escritor fecundo, atento a los signos de los tiempos, cuenta en su obra una extensa lista de artículos publicados en órganos de difusión católica – Testimonio, El Catolicismo, Presencia, Vísperas (Montevideo), Convergence publicación de Pax Romana,- así como en la Revista Colombiana de Psiquiatría, y en diarios de difusión nacional.
Sus libros, El complejo de Layo (1968) e Iglesia, vida y civilización en conflicto (1980), Soberanía de la Fe (1995) recogen respectivamente una crítica a la política demográfica del gobierno colombiano y una esperanzada visión de la función eclesiogénica de la encíclica Humanae Vitae.
“Parte tu pan con el hambriento y a los pobres que no tienen techo llévalos a tu casa. Si vieres a un desnudo vístelo y no desprecies a tus hermanos. Entonces brillará tu luz como la aurora, e irá ante ti la justicia y la claridad de Dios te rodeará. Entonces y Dios te escuchará. Apenas le hables te dirá heme aquí.”(Isaías 58:7)
